El comercio electrónico ha sido posible gracias a la aplicación de la
tecnología, en especial a la internet y su rápida difusión debido al uso de la
computadora y el Smart-phone, esto ha generado una sociedad conectada en tiempo
real y por otro lado como se ya mencionó anteriormente, al perfeccionamiento de
las cadenas de logística que de alguna manera han “reducido” de tamaño al
planeta. Pero estas u otras innovaciones en si mismas o en su conjunto no
podrían haber echo posible este tipo de comercio de no ser por una emoción, un
principio, un valor humano, “La confianza”, esa capacidad que tenemos de
realizar una acción con la firme esperanza de que suceda lo esperado o que otra
u otras personas actúen como deseamos, y es que el comercio electrónico es en
el fondo, en su espíritu, confianza.
Cuando realizamos una compra o una venta electrónica no necesitamos de notarios
ni estudios jurídicos, no firmamos engorrosos formularios llenos de miles de ilegibles
letras diminutas, ni recurrimos a los estados por más legislación, no hacemos
nada de eso, parece ser que no necesitamos esas murallas de papel o esas
trincheras jurídicas, hacemos un click y solo confiamos y es todo, luego, ¿es
esta forma de actuar del ser humano algo nuevo?, ¿es éste comportamiento el
resultado de miles de años de civilización?, ¿entonces es posible que estemos
construyendo una nueva forma de economía? Y lo más importante, ¿Es posible la vigencia
y permanencia de esta forma de economía?.
Para intentar responder a estas interrogantes es necesario embarcarnos en
aquel viaje épico de la humanidad, hace miles de años, cuando las personas
abandonaron la selva e iniciaron la construcción de ciudades y enormes
monumentos y tratar de descubrir aquella fuerza que hizo posible esta
transición que llevó al hombre a atravesar la línea divisoria de lo individual
y actuar en lo colectivo, aquella fuerza que lo llevó de lo primitivo a lo
civilizado.
Al respecto existen muchas teorías, algunos dicen que habría sido por el
descubrimiento de la agricultura y el riego, otros por el comercio y hay
quienes afirman que fue por los extraterrestres, pero muchos dijeron que se
trataba de lago totalmente diferente, algo terrorífico, “La Guerra”. La teoría
era sencilla, la guerra obligó a grupos de aldeas a reunirse para protegerse,
esto llevó a nuevas formas de sociedad organizada, aparecieron poderosos
líderes y estos líderes se convirtieron en Faraones y Reyes, ellos asignaban
tareas y organizaban las vidas, luego “La Sociedad Moderna Nació del Temor”.
Cuando se observan las culturas al volverse esta compleja, la guerra parece
estar presente en todas partes, las sociedades parecen haber estado siempre en
guerra y esta se ve representada en el arte, la arquitectura, las escrituras
hablan de la guerra. Aunque NO es universalmente aceptada, muchos concuerdan
que la guerra fue el impulso fundamental para el nacimiento de la sociedad
moderna…pero es solo una teoría…los arqueólogos no tienen pruebas y por ello recorren
el planeta buscando una manera de convertir la teoría en hechos. Lo que
necesitan descubrir era lo que los arqueólogos llaman “Una Ciudad Madre”, el
eslabón perdido de la arqueología, la primera etapa de la civilización cuando
la humanidad cruzo la gran divisoria. Si la teoría era correcta entonces la
ciudad madre debería estar llena de señales de batalla, pero siempre se
encontraban con el mismo obstáculo, las sociedades constantemente construían
nuevas ciudades sobre las ya existentes, sobre si mismas, eso significaba que
las etapas previas resultaban borradas.
Después de años de búsqueda e investigación los arqueólogos habían
descubierto muy poco, necesitaban descubrir la etapa más antigua sobre la cual
no se hubiera construido, algo primitivo y por eso la búsqueda de la ciudad
madre se desplazó a nuevos lugares.
Hasta esta parte del artículo podemos notar que si la guerra fue la fuerza
que dio origen a la civilización, El espíritu central de todas nuestras
actividades y transacciones económicas estarían
fundamentadas desde un inicio en el TEMOR
y el comercio electrónico como lo conocemos no tendría ninguna posibilidad de
vigencia en la actual sociedad de conocimiento y sería solo asunto de tiempo
para que se retomen las antiguas y engorrosas prácticas contractuales, que la CONFIANZA,
esencia central del comercio en línea, seria solo una pose efímera y en desuso
en poco tiempo, ¿Sería esto definitivo?.
Al parecer la teoría de la guerra no sería concluyente, durante años los
arqueólogos han intentado retrotraerse al momento en el que comenzó el cruze de
la gran divisoria y ahora es posible que finalmente lo hayan logrado, porque se
encuentran explorando una ciudad de pirámides perdidas, tiene 5000 años de antigüedad
y la historia que nos relata sobre porque nos embarcamos en este magnífico
viaje a lo civilizado, es lo más extraordinario que lo que ningún investigador jamás
pudo preveer.
Perú, fue el hogar de una de las civilizaciones mas importantes de todas,
“Los Incas”, en lo alto de la cordillera de los andes ellos regían un poderoso
imperio, hasta que fue destruido por los españoles hace 500 años. Pero los
orígenes de esta gran civilización se extienden miles de años atrás y sus
primeras etapas permanecen ocultos en el misterio, por eso la búsqueda de su
ciudad madre también se dio en esta parte del mundo para explicar porque y donde
hace milenios comenzó todo.
La costa peruana es moderadamente accidentada con muchas playas arenosas y acantilados,
con presencia limitada de pequeñas bahías, ensenadas, penínsulas, puntas y
manglares. El relieve está formado principalmente por llanuras desérticas
clasificadas como pampas, tablazos y depresiones, que se interrumpen por la
presencia de quebradas y de 53 valles en donde está la mayor población y la
mayor producción agrícola del país.
En uno de estos valles el año de 1996, en el Valle de Supe, a 182 km al
norte de Lima en la provincia de Barranca, Un grupo de arqueólogos dirigidos
por la Arqueóloga, Antropóloga y educadora peruana Ruth Shady Solís de la
Universidad Nacional de San Marcos realizó un develamiento que fue en su
momento calificado por un investigador como “El escenario más increíble de todos
los sitios arqueológicos que hubiera visto en ningún lugar del mundo”.
Estos restos arqueológicos pertenecían a la cultura CARAL, como fue
posteriormente llamada, se le atribuye una antigüedad de 5000 años y es
considerada la ciudad más antigua de América y contemporánea con otras civilizaciones primigenias del
mundo como la Sumeria, Egipto, India y China pero a diferencia de ellas(que
intercambiaron sus logros), se desarrolló en completo aislamiento, actualmente,
según todos los indicios, se puede afirmar que a partir de la civilización
Caral se origina la civilización andina.
En la ciudad sagrada de Caral a primera vista se evidencian 6 pirámides
alrededor de una plaza central, pirámides que prueban que los habitantes
habían descubierto la civilización, muestra innegable de una sociedad
moderna en sus comienzos y que brinda una oportunidad históricamente única de
observar la transición en el amanecer de la civilización. “Ciudad Madre”
en donde se puede buscar respuestas a las grandes preguntas ¿porqué había
comenzado la civilización? ¿era verdad que las primeras civilizaciones nacieron
de la guerra? ¿era el temor la fuerza que había dado origen a la civilización?.
Relata la arqueóloga que las primeras semanas de investigación fueron
enigmáticas pues no hallaron nada, no había restos de cerámicos, por lo general
las civilizaciones primitivas se encuentran llenos de cerámicos, las únicas
herramientas que se encontraron no estaban hechas de metal sino de piedra, esto
podría tener una explicación, esta civilización podría pertenecía a una etapa
increíblemente antigua.
Se busco armas, representaciones de guerra u otras cosas relacionadas, pero
no apareció nada, no había evidencias de conflictos, la ciudad no estaba
amurallada, no sentían amenazas de conflictos, no hallaron ningún instrumento
de guerra. Aquí la hipótesis de la guerra simplemente no funcionaba. ¿Si no se
trataba de la guerra? ¿Qué había llevado a estas personas a construir esa
magnífica ciudad?.
Durante las excavaciones los investigadores se dieron con algo bastante
reiterativo y es que encontraron algodón por todas partes, semillas, motas,
textiles y dentro de estos un producto que no era de uso común en un lugar
agrario, “Redes de pesca”, esto aclaró todo. “CARAL SE DEDICABA AL COMERCIO”,
intercambiaban algodón con los pescadores que enviaban pescados y moluscos
como pago, el comercio con algodón generó un enorme sistema mantenido por sus
propios recursos. A decir de la Dra. Shady, “Se generó una esfera de intercambio
económico entre pescadores y agricultores, con las redes se producía más
comida, esto significaba que más personas vivirían en Caral para cultivar más
algodón y eso convirtió a Caral en un centro de comercio próspero, y el
comercio se extendió, se hallaron mercancías procedentes del actual Ecuador,
los andes y de la selva a cientos de kilómetros de distancia”.
Entonces la fuerza de impulso que llevó al nacimiento de la civilización en
Caral hace 5000 años no fue la guerra, fue “EL COMERCIO”, cimentado en
un mundo satisfecho, sin batallas ni fortificaciones, las civilizaciones del
Perú parecen haber nacido de un mundo de paz ...! y la arqueóloga peruana lo
había descubierto...!, después de todo, Caral había sido una ciudad de paz....Así
que ésta es la historia real de Caral, "en el desierto se levantó una ciudad de
pirámides construidas con riquezas que se obtuvieron pacíficamente con el
producto del comercio, produjo una civilización que permaneció intacta por
milenios....", es una historia que aún puede guardar la respuesta a la interrogante
más importante de la arqueología, ¿Porqué los seres humanos cruzaron la gran
divisoria desde los simple hasta lo civilizado?, al parecer hace 5000 años no
necesitaban la guerra, Caral disfrutó una paz que duró por más de 1000 años, un
logro sin comparación en el mundo moderno, “Quizás sea eso el verdadero
legado de Caral”, “La civilización humana no nació del derramamiento de
sangre o del combate, no fue el temor su fuerza de impulso, la guerra fue una
parte posterior de la historia humana”.
Epílogo
Entonces queda histórica y científicamente demostrado, LA CONFIANZA,
espíritu del comercio no contractual, fue la fuerza interior que dio origen a
la civilización en esta parte del mundo y su extraordinaria vigencia nos
muestras que es sustentable en una sociedad que busca su prosperidad, Parece ser
que aquel viaje que inició la humanidad hace
miles de años ha seguido una ruta en círculo y que la actual sociedad del
conocimiento ha sido su puerto de anclaje, las formas han cambiado, pero el
aspecto de fondo, la confianza, ese sentimiento que dio origen al todo vuelve a
tener vigencia y por ende, el comercio electrónico fundamentado en eso, tiene posibilidad
de ser elemento de contínua y duradera prosperidad, al fin de cuenta, no sería
nada nuevo, Caral ya nos demostró que muchas cosas buenas pueden surgir de la
paz.
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